Hoy celebramos la fiesta de la parroquia, la fiesta de la Virgen de Nuestra Señora de las Divinas Misericordias.
Todos unidos como una gran familia nos hemos reunido para felicitar a la Virgen María, para ponernos bajo su protección y para venerarla como ella se merece.
En nuestra parroquia la Virgen, lleva el nombre de Nuestra Señora de las Divinas Misericordias porque la misericordia de Dios viene primero a la Virgen María y de la Virgen se da a todos los hombres; todo lo que Dios nos dió, nos lo dió a través de la Virgen; todo lo puso en su alma, en su corazón; todo lo bueno nos lo da Dios por medio de Ella; por eso hoy como una gran familia y sintiéndonos muy unidos celebramos con alegría la Santa Misa, dimos gracias a Dios por habernos dejado a su Madre y hacemos el propósito de seguir siendo muy fieles, de seguir siempre muy unidos y así tener un solo corazón, que junto con el de la Virgen le podamos dar toda la gloria que Dios se merece.
Le hemos traido flores a la Virgen, como símbolo de nuestro cariño y nuestro deseo de ser buenos.
Después de la Santa Misa hemos tenido una fiesta, donde tuvimos un montón de actividades. Primero una niña nos dio su testimonio de lo divertido que se lo pasa en el hogar y en el campamento de la parroquia, luego los niños de catequesis le cantaron una canción a la Virgen, después otra niña le tocó una canción con la flauta travesera y seguidamente una joven también nos dió su testimonio de lo que ha experimentado al acercarse a Jesús. Para terminar vimos el vídeo de la inauguración de la Parroquia hace cuatro años.
Al salir los niños entregaron sus peticiones a la Virgen y se lanzaron los globos al cielo.
¡Virgen María, Madre nuestra, hoy estamos llenos de alegría para alabarte y para pedirte que cojas nuestro corazón y se lo des a Jesús!

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